Etimología La palabra «almirante» proviene del árabe ʾamīr (“comandante), al que se añade al-baḥr (“del mar”). Los sicilianos, situados entre el mundo musulmán y cristiano durante buena parte de la Edad Media, unieron estos términos formando “almirante”. La primera dignidad de almirante fue creada por Fernando III de Castilla y León, denominándose almirante de Castilla, homólogo del almirante de Aragón. Posteriormente, Alfonso X de Castilla y León le otorgó mayor poder y atribuciones. En el siglo XIII, Ramón Bonifaz fue nombrado primer almirante de Castilla.