El término se aplica libremente a toda clase de sepulcros, monumentos funerarios y mausoleos. Los montículos funerarios prehistóricos o túmulos (pilas artificiales de tierra y piedras amontonadas sobre los restos), por lo general se construían alrededor de una choza que contenía efectos personales del difunto para ser usados en la otra vida. Los túmulos fueron un rasgo prominente del período de los túmulos en Japón (s. III–VI). Estos monumentos, a menudo espectaculares, consistían en montículos de tierra en forma de ojo de cerradura rodeados de fosos. Los túmulos, a veces con forma de animales, fueron también característicos de las culturas indias...